La palabra tiene gran poder. Debemos evitar el uso de palabras para juzgar o avergonzar a otros, erradicando muy especialmente el chismorreo, que es particularmente venenoso.
Hay que hablar con integridad. Decir solamente lo que se quiera decir, evitar hablar contra uno mismo y chismorrear sobre los demás.
La impecabilidad de nuestras palabras nos llevará a la libertad personal y a la abundancia.
Por eso, sé impecable con tus palabras.
ha no decir mas boludeces!!
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